Cada año, ocho millones de toneladas de basura terminan en el fondo del mar, un problema que amenaza a los ecosistemas marinos y a su biodiversidad. Upcycling the Oceans es un proyecto único en el mundo que persigue acabar con este problema recogiendo, a través de pescadores, residuos de los fondos marinos para transformarlos, entre otras aplicaciones, en prendas textiles de primera calidad.
Por su parte, el Proyecto Libera tiene como objetivo prevenir, educar y movilizar a la ciudadanía para evitar que los residuos acaben en la naturaleza, la denominada, ‘basuraleza’, a la que ha puesto nombre esta iniciativa con gran éxito.
La Fundación Reina Sofía concretará con Ecoembes su colaboración con estos dos proyectos así como estudiarán juntos la viabilidad de nuevas acciones que puedan repercutir positivamente en la limpieza de mares y entornos naturales, y en la prevención del abandono de residuos en la naturaleza. Esta colaboración responde al deseo de Su Majestad la Reina Doña Sofía, desde hace mucho tiempo, de apoyar y concienciar a la sociedad, a través de su Fundación, sobre la limpieza y cuidado del medioambiente, principalmente los océanos, y por ende de los animales de este hábitat. Constituida en mayo de 1977, la Fundación Reina Sofía es una entidad mixta de carácter benéfico y cultural, sin ánimo de lucro y de naturaleza permanente. En estos 40 años la Fundación Reina Sofía ha gestionado y promovido más de 150 proyectos de carácter educativo, sanitario, social o de ayuda humanitaria; de los que se han beneficiado miles de personas: niños, mayores, inmigrantes, discapacitados y afectados por catástrofes naturales.
Desde el año 2014, la Fundación Reina Sofía colabora con Ecoembes en el proyecto social La Música del Reciclaje, con el objetivo de ofrecer una segunda oportunidad a niños en riesgo de exclusión social basado en valores medioambientales y en la formación musical.
Ecoembes es la organización que cuida del medio ambiente a través del reciclaje y el ecodiseño de los envases en España. Hacen posible que los envases de plástico, latas y briks (contenedor amarillo) y los envases de cartón y papel (contenedor azul) puedan tener una segunda vida.
